Cuando Don Juan Noriega, en la última década del
siglo XIX subió a un vapor para cruzar el Atlántico, llevaba en su
equipaje la esperanza de volver, apenas un adolescente cuando salió del
vecino pueblo de Cué, trabajo y ahorro, años de espera y por fin el
regreso.
Todo esto es fruto de ese esfuerzo, cosecha recogida bajo otros
cielos y otros soles, para no olvidarlo aquí están sus palmeras y los
magnolios centenarios recordándonos la aventura indiana. Bienvenidos a
La Hacienda de Don Juan.
El Hotel
El edificio de nueva construcción está situado en lo que fue una
antigua finca poblada de manzanos, viejas palmeras y magnolios así como
la verja que la cierra y que data de finales del s. XIX.
Exterior
En la parte posterior, se ha habiitado un "penduz" en el que se ha
instalado un viejo llagar que actualmente está en desuso, junto a él una
zona verde de esparcimiento para disfrutar al aire libre.
Aparcamiento
Contamos con un amplio aparcamiento que dota a La Hacienda de una
comodidad añadida, pues la visita al casco urbano de Llanes se hace
perfectamente a pie sin tener que preocuparse de donde dejar el
vehículo.
VISITA VIRTUAL